perfil en facebook

12/20/2015

Marihuana: perjudicial para la salud


Santiago Villarreal Cuéllar

Transitando por calles de ciudades, pueblos y zonas rurales, se percibe el particular olor al humo de marihuana; aprendí a distinguirlo en la década del setenta en el Barrio Las Cruces de Bogotá; confieso con vergüenza que nunca la he probado. Con el transcurso de los años se hizo común en ciudades y campos. A las puertas de su legalización se fuma con más confianza; claro, ayudó bastante la despenalización de la dosis personal en 1984. Cursa en el congreso de la república un proyecto de ley para despenalizar esta hierba dizque con fines terapéuticos. No sé cuáles serán las virtudes medicinales de la planta, como no sea la tradicional mezcla de hojas secas con alcohol para masajear las extremidades de quienes padecen artritis. Algunas personas dicen recibir alivio, mientras otras tienen que continuar los tratamientos prescritos por el médico, que nunca receta marihuana. No existe hasta la fecha ningún estudio realizado por universidades del mundo entero que demuestre las propiedades terapéuticas de esta planta. Algunas como las de Arizona, California en Estados Unidos, Tel Aviv en Israel, y de Berlín Alemania, realizan investigaciones al respecto, pero aún no hay resultados. Los ponentes de la ley deben ser claros y decirle a la opinión que la legalización obedece al alto consumo del alucinógeno; para que los adictos la fumen públicamente y no escondidos debajo de puentes o lugares insalubres; la ley debe dejar estipulado el tratamiento médico para los adictos.

Aunque no existen estudios que demuestren los perjuicios a la salud ocasionados a los consumidores, se puede deducir que la principal patología es su adicción y eso de por sí ya es un grave problema. Otro daño físico ocasionado por fumar marihuana es la aparición de edema pulmonar a largo plazo cuando el adicto no se somete a tratamiento; el mismo ocasionado por la inhalación de cualquier clase de humo (cocinar con leña o fumar cigarrillo); esta patología si no recibe tratamiento y se suspende la causa puede llegar a ser cancerígena. En algunos pacientes se ha descubierto el contagio de la infección que origina la tuberculosis pulmonar; se debe al consumo del alucinógeno en lugares insanos donde la bacteria abunda. Los adictos se convierten en ansiosos potenciales, patología que los induce a consumir muchas calorías ocasionando algunos casos de obesidad. También eleva los niveles de tensión arterial, que con el tiempo puede llegar a ser crónica. 


Con todos esos perjuicios, soy partidario de legalizar su consumo, igual que debe hacerse con la cocaína, morfina y otras substancias alcaloides. De esa forma será más fácil combatir su adicción.                

0 comentarios:

Publicar un comentario