Santiago Villarreal Cuéllar
El primer paso para la firma de la paz se logró este histórico domingo 26 de mayo de 2013, cuando los negociadores del gobierno y guerrilla lograron ponerse de acuerdo en el primer punto de la hoja de ruta.
El acuerdo consiste en la profundización de la política agraria, que a juicio de las farc ha constituido uno de los más grandes problemas que ha generado la violencia en nuestro país.
Se trata de un ambicioso programa que incluirá la repartición de las tierras en conflicto a los sectores campesinos relegados durante décadas. Sin tocar la tierra de nadie que esté legalizada, según afirmó Humberto de la Calle, vocero del gobierno, se entregará tierras para que trabajen los campesinos que nunca la han poseído, o han sido desplazados de sus regiones.
Con este primer acuerdo, la guerrilla y el gobierno demuestran su voluntad de llegar a unos acuerdos que pongan fin a un conflicto que viene desangrando al país desde hace más de cincuenta años.
No obstante la oposición de los sectores de la ultra y derecha que piden no negociar y continuar la guerra fratricida, el gobierno ha escogido la vía civilizada del dialogo y la negociación para llegar a unos acuerdos que redunden en la anhelada paz de los colombianos.
Distintos gobiernos de América Latina y del mundo, manifestaron su complacencia por la firma de los primeros acuerdos entre guerrilla y gobierno, y hacen votos para que a futuro, todo el proceso de paz se logre como está previsto en la hoja de ruta.
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