Por:
Santiago Villarreal Cuéllar
Muchos políticos del orden
departamental se preparan para una supuesta elección en este año 2012.
Específicamente, creen que habrá nuevas elecciones para gobernación y le
apuestan a la caída de la señora gobernadora Cielo González Villa. Me temo que
se quedarán con los crespos hechos.
De todos es conocido los
diferentes procesos jurídicos y disciplinarios que afronta la doctora Cielo.
Desde antes de las elecciones del año pasado se conocían estos procesos. Sin
embargo, el pueblo huilense, en su mayoría confió en ella y la eligió.
De las investigaciones que
adelanta la Fiscalía contra la gobernadora, el más grabe, a mi juicio, lo
constituye el caso Tigsa. El depósito de millonarias sumas de dinero de la
Alcaldía de Neiva en esa entidad, hizo que se hicieran denuncias por un
supuesto peculado. No obstante, la Fiscalía que adelanta la investigación, ya
emitió un primer pronunciamiento en lo que ha calificado como un peculado
culposo. Como los dineros fueron devueltos en su totalidad a las arcas de la
tesorería de Neiva, no se configura el delito de peculado por apropiación.
Tengo el convencimiento que el fallo final de la Fiscalía, no comprometerá la
libertad de la señora gobernadora, ni mucho menos su desvinculación del cargo.
Se especula por parte de
abogados, tinterillos, leguleyos y políticos, que la señora Cielo será llevada
a la cárcel. Incluso, apuestan que será
en marzo, abril o mayo de este año. Parten del quimérico supuesto, que al caer
la gobernadora en la adversidad, el Consejo Nacional Electoral, convocará a
elecciones atípicas en nuestro Departamento.
De hecho, los diferentes grupos
políticos ya tienen listos sus candidatos. El Partido Liberal, presentaría de
nuevo a su eterno candidato Carlos Mauricio Iriarte. Los conservadores,
jugarían nuevamente la carta del doctor Jorge Fernando Perdomo. Vana esperanza.
Porque a mi juicio, no habrá elecciones en este año en el Huila, y les diré
porqué.
Ya dije, que en mi opinión el proceso
de la Fiscalía no afectará la libertad de la señora gobernadora. Por lo tanto,
continuará en su cargo. Ahora bien. El proceso disciplinario que adelanta la
Procuraduría general de la Nación, a mi parecer sí puede poner en peligro la
estabilidad de la mandataria de los huilenses. De acuerdo a los términos
procesales de ese ente disciplinario y a la severidad del señor Alejandro
Ordóñez, en el mes de julio o agosto de 2012, se podría producir un primer
pronunciamiento. En mi concepto, dicho fallo podría ordenar la suspensión
provisional de la funcionaria por un lapso de tres meses, prorrogables por
otros tres meses. Es decir, si especulamos que dicho pronunciamiento fuera en
julio, los términos vencerían en octubre. Si se prorroga para otros tres meses,
el vencimiento ocurriría en enero de 2013.
Cuando la Procuraduría suspende
provisionalmente un funcionario de elección popular, no hay lugar para convocar
nuevas elecciones. El funcionario será reemplazado en provisionalidad, mientras
se define la situación del implicado. Vuelvo a especular. De producirse el
hecho narrado arriba, le correspondería al Partido de la U, enviar una terna al
Ministerio del Interior, para que el presidente de la república nombre un
gobernador provisional para el Huila. No me cabe duda, que el senador Jorge
Eduardo Géchen Turbay influirá para que en dicha terna se incluya el nombre del
doctor Orlando Beltrán Cuéllar. Tengo la convicción que este será el nuevo
gobernador del Huila, quien reemplazará a la doctora Cielo, mientras aclara su
situación. El Partido de la U continuará en el poder y el senador Géchen no
perderá su espacio político. No me atrevo a ir más allá del 2012. El 2013
seguramente traerá muchas pujas políticas para desbancar el gechismo del poder
en el Huila. Al menos en la gobernación.
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