Santiago Villarreal Cuéllar
El parlamento de la federación rusa, aprobó por unanimidad el viernes 28 de febrero de 2014, en horas de la noche, la movilización de sus tropas hacia la zona fronteriza de Crimea, que se encuentra en poder de las tropas ucranianas que no están de acuerdo con la adhesión de esa nación a la Unión Europea.
Como se recordará, Ucrania vive intensas manifestaciones de protesta, tanto de partidarios de hacer parte de la alicaída Unión Europea, como aquellos que no está dispuestos a unirse a ese modelo que ha quebrado en los últimos años varias economías de países como Grecia, España, Portugal y hasta Italia.
El gobierno ruso de Vladimir Putin, no está de acuerdo que Ucrania haga parte de la Unión Europea, pues su país se vería invadido de productos provenientes de Europa occidental, lo que ocasionaría deterioro a la industria local.
Ucrania es un país que no ha adoptado el modelo económico neo-liberal, el causante de los mayores desastres económicos para la gente pobre del mundo, pero agentes europeos de occidente vienen proponiendo adoptar dicho modelo y admitir a ese país en la Unión Europea.
La decisión tomada por Rusia, de inmediato despertó la inconformidad de Estados Unidos, aliado de la Unión Europea, lo mismo que los gobiernos de esta, que pidieron prudencia para no caer en una guerra de connotaciones internacionales.
El gobierno de Estados Unidos, acostumbrado a intervenir en cualquier país con sus tropas, ahora no ve con buenos ojos que Rusia pretenda intervenir en Ucrania, pues desataría una guerra en la que ellos no están preparados para resistir.
0 comentarios:
Publicar un comentario