- Santiago Villarreal Cuéllar
Como en la novela Crónica de Una
Muerte Anunciada de nuestro glorioso escritor Gabriel García Márquez, la caída
de la Gobernadora del Huila Cielo González Villa, estaba anunciada desde antes
de las elecciones del 31 de octubre de 2011. No obstante, el pueblo prefirió
votarle a esta carismática, joven y atractiva mujer, entre otras razones porque
los otros dos candidatos no ofrecían nada distinto y representaban la misma
clase política amañada, clientelista, típica de nuestras falsas democracias.
Como es conocido de todos, a la
señora gobernadora (porque todavía lo es), le falló en su contra un tercer
proceso disciplinario, que al acumularse con los dos anteriores, la obliga a
dejar el poder. Pero como abogada que es y conocedora de los resquicios
jurídicos, además de estar bien asesorada por el eminente jurista Jaime Bernal
Cuéllar, lo primero que hizo al conocer el fallo por lo medios fue esconderse
para no ser notificada personalmente. Esta triquiñuela alarga su permanencia en
el cargo, al menos por unos días, mientras la notificación se expide por edicto.
Paralelo a esta argucia, su apoderado instauró una acción de tutela
argumentando violación al debido proceso. Ahora esta en juego, si el edicto
notificando el fallo sale primero, o el fallo de tutela alcanza a emitirse
antes de este. Existe un 50% de probabilidades que la acción de tutela falle a
su favor, aspecto que la mantendrá en el poder no sabemos por cuanto tiempo
más. Mientras se definen estos procesos legales, los pre-candidatos a la
gobernación, quienes ya estaban aprontando los aperos, tendrán que continuar
esperando con paciencia hasta que logren coger los caballos, que hasta ahora
parecen estar chúcaros.
Mientras se desarrollan los
acontecimientos en plenas fiestas Navideñas, la señora Cielo se resiste a
abandonar las ricas mieles del poder, y como la hormiga que se aferra al pedazo
de vegetal que carga sobre su cuerpo, ni ventarrones, ni aguaceros, ni los
quemantes rayos de sol la hacen desistir de llevar cuestas su provisión. Se
parece también a esas arañas, que colgadas de su hilo se balancean y aunque su
cuerpo es más pesado que su tela, dan saltos y brincos para no dejarse caer al
vacio. Así se mantiene la señora gobernadora, quien a decir verdad, en su
primer año de gobierno logró importantes proyectos para muchas comunidades del
departamento. De todas maneras y aunque la señora Cielo logre mantenerse
después de esta tempestad jurídica mediática, más temprano que tarde otros
fallos la obligarán a soltar las riendas del poder, dejando al Huila en la
incertidumbre de quién será el nuevo mandatario.
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